Según la tradición popular la ermita de la Virgen de la Sierra está situada en el mismo sitio que la encina en la que apareció la Virgen.
Algún estudioso del tema, como Fabián Martínez Redondo, piensa que incluso antes de la invasión de España por los árabes ya existía dicha ermita. A lo largo de los siglos hemos ido encontrando referencias y pruebas documentales de su existencia.
Se encuentra situada en la ladera de la sierra Calderina, en las estribaciones de los Montes de Toledo.
Construida en un estilo popular. Está formada por una nave sencilla, la cabecera de la Iglesia en cruz latina; destaca el presbiterio y adosado a este se encuentra el Camarín de la Virgen. La cubierta de la nave es de bóveda de medio cañón, sobresale en ella una cúpula bien decorada y de cierta belleza, la cual, a su vez, ilumina a través de una serie de vidrieras y de un lucernario el interior de la iglesia.
Otro elemento que destaca en la ermita es la torre de planta octogonal, tiene cuatro tramos y el tramo final forma el chapitel, en la cúspide hay una bola esférica sobre la que se encuentra la veleta de los vientos.
En la fachada transversal este aparece la ventana del Camarín de la Virgen, y en la fachada oeste se encuentra la puerta trasera de entrada, puerta por donde la Virgen sale en la romería y en sus traslados a Villarrubia de los Ojos. También, se accede al templo a través de una puerta en la fachada sur, es el acceso de los fieles. Enfrente de esta, antes aparecía una puerta tapiada, que en la actualidad es la entrada a un anexo habilitado como museo de la Virgen de la Sierra; en él encontramos fotografías, vestidos, mantos y objetos dedicados al culto que posee la Virgen de la Sierra.
En relación a la decoración del templo destacan dos lienzos, pintados por la Madre Asunción, relacionados con la Anunciación de la Virgen. Separa el presbiterio y el Camarín del resto de la nave una cancela abatible ornamentada con finos dibujos. Y, en el Camarín sobresale la Imagen de la Virgen, sobre un trono en madera de nogal, adornado a su vez con ángeles y guirnaldas de flores; también aquí destaca la vidriera de su ventana del fondo, en la que se representa la aparición de la Virgen al pastor.
En su conjunto esta ermita invita al recogimiento, a la tranquilidad y a la reflexión. La presencia de la Virgen de la Sierra crea un ambiente de paz y sosiego.
Sendilla de la Virgen
Recorrer la Sendilla de la virgen es recorrer los Montes de Toledo, es conocer la Llanura Manchega, divisar el Parque Nacional de las Tablas a vista de pájaro y acercarse a la historia y el patrimonio. Toda una experiencia concentrada en tan solo 9 kilómetros. El Sendero puede recorrerse a pie o en bicicleta, es lineal y une el Santuario de la Virgen de la Sierra con la carretera de Villarrubia de los Ojos a Fuente el Fresno (a la altura del kilómetro 3) y circunda el límite sur del LIC (Lugar de interés comunitario) “Montes de Toledo” dentro de la Red Natura 2000. Está incluido además en la Ruta del Quijote.
El itinerario discurre por la Sierra de Villarrubia de los Ojos quese encuadra dentro del conjunto deLa Calderina. Esta es la denominación que recibe el sector más oriental de losMontes de Toledo, donde se encuadra también elParque Nacional de Cabañeros. Se trata de uno de los relieves más antiguos de la Península Ibérica y del continente europeo y es refugio de algunas especies emblemáticas en peligro de extinción, como eláguila imperial, el buitre negro, ellince ibérico. En el tramo cercano al Santuario podemos disfrutar de la fauna y flora característica del monte mediterráneo bien conservado con encinas, carrascas, cuernicabra, romero, etc. Y según nos vamos acercando a la carretera el paisaje cambia gradualmente hacia cultivos de viñedo olivar y cereal. Pero si algo es destacable en nuestras sierras es el olor, producido por las muchas especies aromáticas (lavandas, tomillo, romero, jaras), que hacen el paseo mucho más agradable.
Caminamos por los Montes de Toledo. Pero frente a nosotros divisamos en todo momento la extensa y vasta Llanura Manchega, y el Parque Nacional de las Tablas, siendo las Sierras de Villarrubia literalmente su mirador natural. Esta ruta nos permite, por tanto, acercarnos a ambas unidades geográficas Monte y Llanura, unidas por un biotopo de transición entre ellas denominado raña, un herbazal adehesado muy típico de los Montes de Toledo que termina por fundirse con las dehesas de Casablanca y Zacatena próximas al Humedal de Las Tablas.
En el aspecto histórico-cultural, en la sierra deLa Calderina se asienta un importante grupo de yacimientos arqueológicos que se asocian a la cultura prehistórica delBronce de La Mancha, siendo estos los conocidos como castellones coetáneos a “las motillas” (del 2200 al 1350 a.C.). Los castellones eran emplazamientos dispuestos en las más elevadas y agrestes alturas de estas sierras con un claro sentido estratégico (difícil acceso, proximidad a cursos fluviales y tierras fértiles serranas) siendo en algunos casos simples puestos de vigilancia y en otros auténticos poblados de hábitat. En esta ruta podemos divisar los castellones del El Cerrajón, Peñón del Moro y Manciporras. De época más reciente es el Santuario de la Virgen de la Sierra, patrona de Villarrubia de los Ojos, aunque su origen puede que se remonte a tiempos lejanos, ya que el escenario donde se ubica, muy evocador y junto a un destacado manantial de agua, así como algún resto prerromano y romano encontrado en las inmediaciones, invita a pensar que ya en época íbera y oretana pudo ser un lugar de culto. La actual edificación religiosa es del siglo XVII, de singular belleza con un conjunto de patio cuadrangular y porticado por el que se accede al santuario, que corresponde al típico patio solariego manchego.Sin duda un lugar mágico en el que recomendamos que empleen un poco de su tiempo para visitarlo.
Deporte, naturaleza y cultura en un enclave privilegiado y en un ambiente de paz y relajación. Eso es lo que ofrece la Sendilla de la Virgen, una ruta senderista en la localidad de Villarrubia de los Ojos.